Nunca he sido amantes de las tecnologías.
Es más, cuando algo se ha roto en casa, he preferido usar la excusa de no sé cómo arreglarlo, que mirar en Youtube la posible solución.
Quizás se deba que para ello hacen falta 2 cosas :
Que te guste y paciencia.
Sin embargo, hay cosas para las que me las he apañado saber como funcionan, porque me interesaban.
Te lo cuento, y luego te digo cómo puedes aprovecharlo en tu vida.
Mira, yo crecí en la época de los 80.
Y de pequeña mi padre me regaló un Walkman para escuchar música.
Por si no eres de esos tiempos, ese aparato, era el equivalente al mp3 de ahora, pero analógico y servía para meter una cinta de casete.
Eso sí, tenía los mismos botones:Play, stop, retroceso y adelantar.
Aunque es fácil ahora, cuando eso era uno de los primeros aparatos tecnológicos que caía en tus manos, era algo casi mágico que había que explorar.
Y eso hacía. Al igual con el primer VHS (El Netflix de antes. Que era para ver pelis en la TV, previo ritual de selección yendo al videoclub de tu barrio).
Todo un mundo lleno de botones, manual de instrucciones y palabras en inglés.
Si los hubiera tenido que usar para otra cosa distinta que poder escuchar música, o ver pelis, es probable que ni siquiera hubiera intentado ver cómo funcionaban.
Sin embargo, al interesarme, tocar una tecla, luego otra, conectar y desconectar un cable para ver qué hacía, era parte de esa descubrir natural.
Como un sí, fuera un explorador dentro de la cueva de Altamira.
Saber cómo funcionaba me daba ventajas.
Pero en nuestras vidas hay muchas áreas que nos «dan pereza» para adentrarnos en ella y saber como funcionan, para sacarle provecho.
Cuando en realidad, no es algo tan complicado, basta con darle al encendido y empezar a curiosear.
Pero sobre todo para aprovecharte de los beneficios que conlleva.
Por ejemplo:
¿Por qué me da vergüenza hacer x?
¿Por qué tengo miedo de dar el paso?
¿Por qué me siento de tal forma?
¿Por qué me bloqueo en estas situaciones?
¿Por qué no encuentro motivación, fuerza de voluntad para conseguir tal?
Conocer el motivo del porqué te comportas de una forma o sientes, te abre muchas puertas.
Igual que Alí Babá y los 40 ladrones.
Porque te permite romper un patrón que se repite en tu vida como una canción cansina de verano.
Por eso conocerte mejor, te hace tener más inteligencia emocional.
Y con ello mejorar la relación que tienes contigo y tu alrededor.
Si es algo que te interesaría saber manejar igual de bien que un adolescente, el TikTok, puedo ayudarte.
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